Cada acción que hacés dentro de la app está protegida con varias capas de seguridad:
Verificación de identidad al crear tu cuenta: Te pedimos una selfie y validamos tu identidad con biometría.
Acceso desde un solo dispositivo: Tu cuenta se vincula al dispositivo en que te registraste. Si querés usar otro, hay un proceso de validación.
PIN transaccional: Cada operación requiere un código de 4 dígitos que solo vos conocés.
Códigos de un solo uso (OTP): Te los enviamos por SMS o email para confirmar acciones clave.
Congelá tu tarjeta o cuenta desde la app: Si algo no te cierra, podés congelar el acceso con un solo clic.
Monitoreo con inteligencia artificial: Analizamos en tiempo real los movimientos para detectar comportamientos inusuales y protegerte.
Tu cuenta está pensada para cuidarte en cada paso. Y si alguna vez sentís que algo no está bien, escribinos por la app: estamos para ayudarte siempre.